Los presidentes de las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME, Juan Rosell y Antonio Garamendi, respectivamente, y los secretarios generales de UGT, Pepe Álvarez, y de CCOO, Unai Sordo, han firmado hoy el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) para los años 2018, 2019 y 2020, en la sede del Consejo Económico y Social (CES), ante la presencia de la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, y la exministra de Empleo, Fátima Báñez, así como de otros representantes políticos, empresariales y sindicales.
El presidente de CEOE, Juan Rosell, dijo durante su intervención que hay que ser “valientes” y “arriesgados porque hay muchas cosas que cambiar", en referencia a las reformas pendientes y a la negociación con el Gobierno. El crecimiento de los salarios "es bueno para la sociedad pero para eso necesitamos a empresas punteras y con éxito”, dijo el líder de los empresarios.
"Necesitamos cuantas más empresas mejor para crear empleo", opinó. "Las empresas son más eficientes que cualquier otro organismo porque son capaces de dar más con menos", afirmó. Juan Rosell pidió una nueva legalidad "sostenible". Recordó a los equipos técnicos de las dos organizaciones, a la nueva ministra Magdalena Valerio y la exministra Fátima Báñez. "Seamos valientes e intentemos hacerlo por la vía del acuerdo", concluyó.
Por su parte, el presidente de CEPYME, Antonio Garamendi, enfatizó que "esto es un acuerdo de la gente de la calle, de los que están cada día trabajando". "Para los representantes de los empresarios algunas partes del acuerdo nos cuestan", reconoció, remarcando que él es el representante de las pequeñas y medianas empresas. “La economía sumergida es el problema real de España; instamos a los poderes públicos contra ella", avisó durante su intervención. También alertó contra el "absentismo indeseado".
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, señaló que el acuerdo de negociación colectiva "reivindica el papel de los agentes sociales". Según Sordo, los agentes sociales "tienen que tener la capacidad de orientar las políticas laborales y salariales". A su juicio, un acuerdo por el empleo y la negociación colectiva es "poner en valor el papel que en una sociedad democrática tenemos que representar las organizaciones sindicales y empresariales".
Dijo que, con el acuerdo, se inicia una recuperación de los salarios en España, ya que incluye medidas "muy relevantes" para ayudar a los colectivos que más han sufrido con la crisis. "Es una buena medida de distribución", remarcó. "Creo que es un acuerdo que aspira a dialogar con el poder político y las instituciones, identificando una serie de materias que implican la negociación tripartita", remarcó.
“El sistema laboral en España tiene evidentes márgenes de mejora y creo que es una actitud inteligente de los agentes sociales emplazar al diálogo", opinó. Dio un dato: que el 47,3% de los trabajadores de España tiene un contrato indefinido y con jornada completa. Es decir, que más de la mitad de los empleados están a media jornada o con contrato temporal.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, señaló que el acuerdo llega después de un periodo largo sin acuerdo, que viene tras una negociación difícil y que han puesto blanco sobre negro las soluciones de cómo deben ser las relaciones laborales en los próximos tres años de España. "Quiero exponer la importancia que tiene la recuperación del diálogo social en nuestro país", señaló Álvarez.
El líder de UGT dijo que "estamos satisfechos" con el acuerdo, porque representa un paso para recuperar la riqueza que se está generando en nuestro país. Destacó que el salario mínimo se situará en 1.000 euros y que las más beneficiadas son las mujeres, que son las que sufren peores condiciones.
"Las CCAA donde los salarios son más bajos, coincide con los niveles de renta per cápita más bajos, por lo que hacemos una contribución al equilibrio territorial", afirmó. "Creo que este acuerdo abre la puerta a lo que tiene que ser el diálogo tripartito", dijo. Aspiramos a que haya un país socio.